Me sorprende que, en una noche toledana, más de setenta pueblanos se acerquen al Museo de La Celestina a escuchar una conferencia. Y, por cierto, una buena conferencia. Don Santiago Arellano Hernández impartió su saber sobre la obra de Fernando de Rojas, Transformación de Pármeno y Melibea por el influjo de Celestina, claves para una educación de la juventud. Sin perder más tiempo, el Conferenciante pasó a disertar sus cuatro claves de ésta lectura. Fernando de Rojas se atreve a sondear aspectos poco conocidos del ser humano, sin llegar a una erudición que mate su lectura. La primera clave es la exultación de la sexualidad humana, convirtiéndola en el único objetivo a primera vista. La segunda clave será el deseo sublimar de hablar de sexualidad, como dominio de la palabra que seduce y domina al otro elocuentemente. La tercera clave será el deseo, la ambición, la avaricia, la riqueza que tanto como ayer, hace quinientos años, o como hoy, hace trágica la vida del ser humano. Y la cuarta clave es la motivación que tiene Fernando de Rojas de comunicar a los demás lo que ve y siente que ocurre en círculos de su sociedad que se desmadra. Calixto, como un nuevo rico, vive a su capricho. Pármeno, de infancia triste sabe la experiencia dura de la vida que le ha dado grandes lecciones. Melibea, inteligente, bella, insensata, cae en las manos del amor y de su amado. Por eso, para Don Santiago Arellano, es necesario la comunidad educativa. Todos educamos. Muchas veces los padres quedan deslumbrados por el conocimiento de sus hijos y no saben de sus vidas nada. Como ocurre a los padres de Melibea que lloran al final a una hija que no han conocido.Me gustaría destacar la amplia participación de asistentes y la riqueza de su debate. Qué pena que mis amigos se quedaron con el micrófono en la mano y la pregunta en la boca.Pero para nuestra sorpresa ya era medianoche bajo el cielo toledano.
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