martes, 14 de agosto de 2007

Desde La Puebla de Montalbán

Hola, Amigos. Ya estoy en La Puebla de Montalbán. Llegué anoche y me agrada un montón que me haya acompañado mi hermano Juli; para él van a ser sus días de vacaciones ya que es un gran seguidor y admirador del Festival Celestina. Tengo el síndrome, la depresión, la enfermedad y todos los traumas posibles que se pueden tener después de las vacaciones. Además, esta mañana no ha parado de sonar el teléfono; daba la impresión de que me estaban esperando para un montón de actividades y de cosas a las que todavía no encuentro las fuerzas o las ganas suficientes para realizarlas. Espero que eso de volver a dormir en mi cama me reconcilie conmigo mismo y dentro de unos días vuelva a ser el mismo.
Mirando atrás veo un montón de cosas; experiencias, personas, lugares, miradas. Me da miedo recordarlo, pues un verano de esos corrientitos se ha manifestado como el superior. ¡Qué cosas tiene la vida que nos sorprende! Como mi amiga Blanca que estuvo tratando con todos los jóvenes del barrio para que no me aburriera y con el mejores migas comí fue con una persona mayor que ya reconocían los veraneantes nuestra amistad. Y es que el amigo cómo bailaba. Cualquiera le diría que se jubilaba en septiembre. Pues así, sorprendido, agotado, cansado, enriquecido, abrumado, y un montón de cosas más podría decir de mis vacaciones.
Sé que en su día llevaba el propósito de escribir cosas sobre mi Madre, y las tengo. Pero no he podido escribir mucho. He acribillado a mi Madre a preguntas, pero en el Mar la única mesa disponible era la de la cocina y casi siempre la estábamos ocupando uno de los tres para comer. En mi pueblo, en Quero, imposible, las Fiestas son las fiestas y quién sacaba inspiración para poner por escrito una nota, una anécdota, un detalle. Espero que cuando caiga el calor y con el cuaderno con notas y direcciones de personas que me pueden ayudar, me pueda poner a escribir esta historia que tengo en mente. Ah!! Que no os he dicho que sigo con Los Pilares de la Tierra. Promesa que hice a mis oyentes y que mantengo. No me extraña que cautive a sus lectores. Bueno. Cuando pueda os pondré unas fotos para enseñaros parte de la riqueza de mi verano. Seguimos en contacto.

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