sábado, 21 de marzo de 2009

VaG, dn Un Bosque de Rocas

Las puntas rocosas y precipicios que encontramos en la zona de Meteora fueron sedimentos de un mar interior. Se dice que hace más de diez millones de años, en la época llamada Plioceno, los movimientos tectónicos verticales elevaron toda la región por encima del nivel del mar. En los albores de la civilización, las rocas se habían descompuesto y erosionado adoptando formas fantásticas, como un bosque animado. Ya en el siglo XI las imponentes cuevas que encontramos en estas rocas montañosas se habían convertido en el lugar idóneo para retirarse en solitario los monjes más ascetas. Hasta veinticuatro monasterios se llegaron a construir en estos pináculos. Hoy solo son seis los que tienen actividad religiosa alojando a monjes. Es frecuente la visita de fieles, peregrinos y turistas.

No hay comentarios: