sábado, 21 de marzo de 2009

VaG, dn 2º Día Arachova


Comienza el segundo día del viaje. Madrugar mucho. Intento desayunar, aunque el cuerpo no responde. Hago la maleta y la bajo pronto, junto con la de mi compañero de habitación, Ängel. Aníbal nos espera en el autobús, junto a Basili, que previamente ha metido en el autobús todas las maletas. Todas menos una, la de mi compañero, Ángel. Nos daremos cuenta de su falta al final del día, cuando lleguemos al Hotel de Kalambaka.
Salimos de Atenas por las mismas calles importantes por las que el día anterior estuvimos recorriendo sus calles y su historia. Aníbal hace una consulta con todos en el autobús. Agios Loukas es un espectacular monasterio, pero no sabe si merece la pena desviarse tanto de nuestro circuito cuando mañana veremos más monasterior. Se le acepta la propuesta y Aníbal saca un mapa que ha comprado de Grecia, lo pega al televisor y comienza la clase de historia y geografía, tratando de explicar la lengua griega desde el significado de sus letras. Aníbal sabe de todo y no se corta a la hora de dar su opinión. Mientras vamos de viaje trata de llamar la atención sobre algunas caracteristicas que nos encontramos en el camino; monasterios, monumentos a la guerra, pequeñas iglesitas en el camino o pueblo que atravesamos. Pero lo que más me gusta es cuando habla del carácter de los griegos, de su forma de ver el mundo y, sobre todo, del humor que tienen a la hora de ofrontar problemas.
La primera parada técnica sirve para tomar un café y reponer fuerzas, tratar de despertar el cuerpo y animar el espíritu. La música que hay de fondo a las palabras de Aníbal me encantan, tienen que ser de algún cantautor griego. La música griega me ayuda a estar despierto, a mirar inspirado el paisaje que atravesamos y a reflexionar sobre mis cosas. En el café hablo con Sebastián para hablar de la misa que tendremos por la noche. Me hace gracia. Me aconseja, en voz de los antiguos, que no sea ni mísera ni miserable.
Antes de llegar a Arachova paramos para ver y hacer unas fotos panorámicas del viaje. Arachova es un lugar emblemático para practicar el esquí. Es el comienzo del valle de Apolo. Vamos a Delfos.

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