Melibea 2010.

Durante muchos años al terminar las vacaciones el síndrome postvacacional tenía la esperanza de una sonrisa que me llenaba de ilusión. Era la mejor forma de terminar el verano, cerrar las vacaciones, y abrir el nuevo curso. El Festival Celestina me daba vida, abría mi mente a nuevas proyecciones, nuevos planes y especulaciones, a nuevas amistades y a refrendar con el pueblo. Mucho trabajo, muchos nervios, pero me sentía bien.

Hoy hago las maletas y reconozco que no es lo mismo, aunque los retos de la Delegación Diocesana de Guadalajara con la JMJ2010 también me llena de ilusión. Pero no es lo mismo.

Cuando he visto el rostro de esta bella Melibea, en esta postura transcendental, me he visto a mi mismo durante muchos años. Tal vez me cantaréis aquello de "Teatro, lo tuyo es puro teatro" o que tengo "Parole, parole, parole". Pero es que decir La Puebla de Montalbán es decir, con la fuerza de un cantautor, que el espectáculo continúe, aunque sea con medio pobres. La cultura ha de salir del dominio poderoso a las calles de la gente sencilla. Ya está bien de ignorancias. Sin una educación y unas notas de cultura no podré sostener la fe de un pueblo que no se conoce a sí mismo.

Quiero felicitar a esa joven que pone rostro al personaje de la Celestina y al rostro femenino pueblano y que con orgullo pasea su juventud. Pero también felicitar a Nacho González por esta magnífica instantánea que recoje muy bien el quebranto celestineo del amor. Y, como siempre, felicitar a ese pueblo y a esa gente que tanto quiero.

Felices Fiestas de La Celestina 2010.