sábado, 22 de mayo de 2010

Ven, Espíritu Santo.

Anoche me pasé toda la Vigilia de Pentecostés mirando a un cristo resucitado que había en la capilla donde rezábamos el grupo de los creyentes de Guadalajara. La celebración fue en la iglesia del Santísimo Sacramento y, lamentablemente, éramos pocos, no sé si pasábamos de sesenta; y eso que había muchos sacerdotes y religiosas. A Jesús le seguía mucha gente, muchas personas, sin contar mujeres y niños; quita aquí a los curas y a las monjas, ¿qué queda?
¡Qué pena!
Tanto estuve mirando ese cristo que le pedí a mi compañera de asiento papel y lápiz para escribir.

"Estoy mirando un cristo precioso, parece que está vivo. Es un cristo resucitado, un cristo joven, de treinta y tres años. Lo miro y me siento vivo con él. Lo dejo de mirar y me siento viejo, mayor. Tiene un cuerpo joven. Tiene unos pies joven. Tiene un rostro joven. Tiene un peinado corto y la perilla le hace muy atractivo. Es joven. Jesús es joven. Y yo, en esta noche me siento mayor y aburrido.

El tiene treinta y tres años, podría ser un papá joven. Yo, con cuarenta y cuatro, bien podría ser abuelo. Lo miro y no me canso de mirarle, porque mirándole me siento más fuerte, más joven, más hombre.
No sé, pero siento que él no me mira, que mira a todos. Me gustaría que en esta noche este Jesús vivo, resucitado y joven, me mirase, que se fijase en mi.

Deseo el Espíritu Santo. Esta noche, más que otras noches, y eso que la noche es mía, deseo la presencia, sentir, notar el Espíritu Santo. ¿Por qué?

Creo que Jesús no está aquí. ¿Aquí, aquí? Creo que solo hay una bella talla de madera que custodian en esta iglesia en la otra Guadalajara. Pero aquí no está Jesús.


Jesús está con los jóvenes, con los que se sienten jóvenes y no tan protagonistas. Jesús está con los del botellón, esta noche permitido por ser la Feria Chica. Jesús está con los que han ido al concierto de Fito. Jesús está en esas familias que en una terraza de verano ya celebran los últimos minutos de un día de Primera Comunión. Jesús está con los amigos que hablan de hacer un viaje. Jesús está en esas chicas que se pasean de la mano. Jesús está. Siento que Jesús está, en esos rostros que me saludan, en esa palabras que me dan calor, en esas miradas que me reconocen.

Tal vez aquí esté también el espíritu de Jesús, pero lo veo atrapado en protagonismo, en soberbias, en destacar. Qué grande ha de ser nuestra reflexión dentro en la Iglesia, dentro de nuestras iglesias, de nuestras comunidades, de nuestros grupos. Si no tenemos el Espíritu de Jesús. Si no sentimos el Espíritu de Jesús, y encima andamos sin complejos, nuestra luz no iluminará a nadie porque nadie nos necesitará.
Ven, Jesús.
Ven, Espíritu de Jesús.
Ven, Espíritu Santo.
Abrásame mi egoísmo y sácame mis miedo para dar a conocer, para anunciar, para evangelizar la Buena Noticia a los hombres, especialmente a los jóvenes como Tú"

2 comentarios:

Noelia CP "Las Ranas" dijo...

gracias por escribir asi de bien!!!

Noelia CP "Las Ranas" dijo...

comentame mi blog please
y mira madeinnaty.blogspot.com