A pesar de que los transportes se hacen en autobús, uno no pierde la conciencia de ser un peregrino en Tierra Santa. Hay lugares, como el Monte Carmelo, que te hace sentir la experiencia de pisar terreno sagrado. Situado en la bahía de Haifa y con vistas al Mediterraneo se encuentra este precioso lugar. No me extraña que los cananeos sacrificaron en este monte sus ofrendas a los dioses y que el profeta Elías encontrara fortaleza espiritual pues se nota una cierta energía en la "Stella Maris".
jueves, 24 de febrero de 2011
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