
Siento una gran envidia de mis amigos de Madrid que pueden gozar de tantos eventos en este tiempo de
terracitas, conciertos y teatros al aire libre. La zona de Conde Duque me apasiona aunque a la vez la desconozco. Por eso creo que en La Puebla de
Montalbán tendríamos que plantear el verano como un hito cultural a potenciar. Es verdad que muchos
pueblanos se van de vacaciones, pero son muchos más los que vienen estos días a descansar, y todos sabemos que desde el chupinazo
sanferminero que para nosotros explota para sacar al
Vaquerito, el Santísimo Cristo de la Caridad, hasta la representación de la Celestina a finales de agosto, La Puebla de
Montalbán se llena de fiesta, alegría y cultura por todas sus calles. Y es que los veranos en La Puebla están llenos de vida, hay como un común denominador en la voz de Radio Puebla que se escucha en casi todos los establecimientos del pueblo, los grupos de aquí muestran su folclore es las noches de los sábados y los que buscan hacernos
reír ya se valen para sacarnos carcajadas. La Puebla tiene su verano, y como el de Madrid, tendría que estar más motivado. Las terrazas se llenan por las noches, al atardecer el Colesterol tiene mucha circulación, los corrillos de las calles alegran a los paseantes y nuestra plaza y el paseo de la Soledad parecen iluminados por la gente que los frecuenta. Tal vez tendría que moverme menos por la envidia
madrideña y dejarme llevar por la inspiración
pueblana para disfrutar más de la vida y hacer de mi verano un tiempo lleno de creación sociocultural. ¿Me ayudas? Así amanece un seis de julio en La Puebla de Montalbán. Comienza el verano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario